Aislamiento de techos en contacto con espacios habitables, suelos en contacto con espacios habitables, suelos apoyados sobre el terreno, cubiertas planas o inclinadas sin posibilidad de cámara de aire y, en general, de todas las zonas habitables en contacto con zonas no habitables.

Ventajas:

Espesor reducido ante los aislantes convencionales.
Fácil de instalar.
Aislante térmico-acústico al ruido de impacto para su colocación en suelos. Resistente a los ácidos del mortero fresco. Libre de CFC. Muy ligero. Insensible al agua y a la humedad. Barrera de vapor. Fácilmente reciclable. Aislamiento constante todo el día. Totalmente antialérgico. No favorece la creación de hongos y bacterias. Valores de aislamiento según norma UNE-EN 15524-200.

Modo de empleo

La superficie debe estar seca, sin humedades, limpia y sin restos de escombros.
Extender el rollo sobre la superficie a trabajar, empezando por el zócalo, y con la cara de polietileno expandido en la parte superior.
Apoyar el aislante unos centímetros sobre el zócalo para evitar puentes térmicos y acústicos.
Solapar a "testa" la siguiente lámina con la anterior y recubrir las juntas con cinta de aluminio, vigilando de no dejar espacios entre láminas que pueden generar puentes térmicos y acústicos.
Una vez colocado el zócalo, recortar los sobrantes de lámina.
Una vez finalizado el proceso, ya se puede colocar el mortero.

Compuesto por

Lámina de polietileno con burbuja de aire seco.
Lámina de plástico protector del aluminio.
Lámina de aluminio puro de 12 μ de espesor.
Lámina de plástico protector del aluminio.
Lámina de polietileno expandido no reticulado de celdas cerradas libre de CFC.